La evolución de la tecnología ha generado una evolución en la manera como se llevan a cabo una gran cantidad de actividades que competen al entorno empresarial. Actualmente, la tecnología dirige innumerables procesos en el ámbito corporativo; lo que implica una gran cantidad de ventajas como la automatización, el acceso a información, el almacenamiento amplio de datas y mucho más. Sin embargo, también implica un porcentaje de riesgo debido al hackeo, por ejemplo:
- Robo de datos
- Espionaje corporativo
- Sustracción de información financiera
- Sabotaje
Cualquiera de estas actividades ilícitas puede poner el riesgo parte importante de las actividades de una empresa con efectos altamente negativos. Es por ello que resulta completamente necesario disponer de un servicio de ciberseguridad que garantice el resguardo de información, de procesos y más.
¿Qué es la Ciberseguridad?
Son el conjunto de métodos y técnicas que se aplican para resguardar la seguridad de computadores, redes, servidores, sistemas, dispositivos, datos y más. El objetivo principal es evitar ataques informáticos, robo de datos y cualquier acción que ponga en riesgo la empresa desde el entorno digital.
¿Qué abarca la Ciberseguridad?
Debido al uso extendido de las tecnologías para facilitar las actividades corporativas, son muchas las aristas que tiene que cubrir la ciberseguridad. Entre las áreas más importantes destacan las siguientes:
- Seguridad de redes, que protege a la red de la empresa de ataque dirigidos y también de malware oportunista.
- Seguridad de la información, que se concentra en proteger los datos de cualquier naturaleza de la empresa
- Recuperación ante ataques refiere al protocolo de la empresa ante ataques para minimizar el impacto y responder ante la crisis.
- Seguridad operacional, que se encarga de brindar el acceso a la red y a la información solo al personal o dispositivo autorizado.
- Capacitación del usuario, que intenta darles a las personas de la organización herramientas para llevar a cabo actividades digitales, para minimizar las posibilidades de ser objeto de ataques.
- Seguridad de Aplicaciones, para mantener seguros los softwares y dispositivos.
¿Cómo se aplica?
No existe un método único para la aplicación de las técnicas de ciberseguridad, esto responde a una de las características fundamentales de una buena ciberseguridad: la flexibilidad. Por lo tanto, para establecer una ciberseguridad apropiada es necesario evaluar la situación general de la organización. Esto implica un periodo de diagnóstico extenso, cuyos resultados permitirán conocer cuáles son las acciones que se deben aplicar para construir una ciberseguridad sólida.
Sin embargo, las acciones que se apliquen en pro de proteger el espacio digital de la organización se pueden dividir en los siguientes niveles:
- Prevención: es la aplicación de acciones que tienen como finalidad evitar que se den situaciones de ataques o filtraciones que pongan en riesgo dispositivos, sistemas, información y más. En este nivel, es muy importante incluir a todos los integrantes de la organización en pro de la defensa digital.
- Localización: es la implementación de estrategias que permitan localizar la fuente de una amenaza en progreso. Esta técnica requiere de la acción de personal especializado.
- Reacción: refiere las respuestas técnicas que se deben aplicar una vez que una amenaza ha sido identificada y localizada para eliminarla y seguidamente para evitar ataques similares. También se lleva a cabo por personal especializado.