En esta época, es necesario adaptarse a nuevas modalidades de trabajo, nuevos entornos y algunas medidas que pueden resultar incomodas. Sin embargo, prácticas como el uso del EPP (equipo de protección personal) pueden marcar la diferencia en cuanto a la bioseguridad en tu empresa.
Cuando la Organización Mundial de la Salud recomendó a todos los gobiernos entrar en una cuarentena estricta, obtuvimos una excelente respuesta de nuestra gerencia. No fue problema implementar las normas de bioseguridad y migrar a ciertos empleados al teletrabajo. Sin embargo, durante unas semanas estuvimos debatiendo si sería responsable de nuestra parte volver a la oficina.
¿Qué es un EPP?
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Durante otras crisis de bioseguridad, como las epidemias del ébola o la influenza, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha presentado siempre la misma solución: el uso de EPP.
Estas siglas significan Personal Protective Equipment (PPE) en inglés, y Equipo de Protección Personal (EPP) en español. Se refieren a la vestimenta necesaria para cumplir los protocolos de seguridad, es decir: guantes, mascarilla médica, gafas de protección, pantalla facial y bata médica.
Sin embargo, estamos hablando de una oficina donde se realizan actividades administrativas y tecnológicas. Por lo tanto, decidimos reducirlo simplemente al uso de mascarillas, pantallas faciales y guantes.
Y desinfección, muchísima desinfección. Nuestro personal de limpieza se convirtió en uno de los activos más valiosos de nuestra empresa.
Del EPP al CPP
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Así como la OMS diseñó el concepto de EPP, en Quid Solutions preparamos otra estrategia de bioseguridad para nuestros empleados: Conductas de Protección Personal, o CPP.
Hablamos de simples tareas personales que cada uno de nuestros empleados, supervisores/gerentes, y todo nuestro personal debe llevar a cabo mientras realizan sus actividades:
- Utilizar gel antibacterial cada vez que salga, y entre, de su estación de trabajo.
- Lavarse las manos constantemente.
- Llevar siempre el EPP.
- Mantener una distancia de al menos un metro y medio de los compañeros.
- Cumplir con todo el CPP de los trabajadores.
- Asegurarse de que exista uno o más puntos de suministro de gel antibacterial.
- Ordenar los puestos de trabajo para mantener una distancia segura entre ellos.
- llevar sus pertenencias necesarias que utilizarán en el horario laboral.
Estas prácticas deben ser tomadas como un plan de gestión gerencial antes que como recomendaciones a los empleados. Es responsabilidad del equipo de supervisión estar al tanto de que se cumplen los procedimientos y se cuente con los recursos necesarios.
Nuestras recomendaciones
Anteriormente, hemos mencionado estrategias para sobrellevar estos momentos difíciles, como el teletrabajo o las modalidades outsourcing y outtasking. Sin embargo, recomendamos ampliamente llevar a cabo las modalidades EPP y CPP de una manera estructurada.
Hemos dicho antes que el 80% de nuestro personal trabaja desde casa. Eso significa que el 20% sigue llegando a las oficinas, y por ello necesitamos mantenernos sanos, seguros y en óptimas condiciones. Solo de esa forma lograremos mantener nuestro estatus de élite en la industria tecnológica.
¿Habías escuchado antes del EPP o el CPP? ¿Cómo cuidas a tu equipo de trabajo?